Hablamos de ahorro, y nos invita a echar un vistazo en cómo estamos organizando y planeando nuestra vida financiera.
Si bien, la cultura del ahorro está lejos de ser prioridad para mucha gente, ha ido tomando relevancia en los últimos años.
Y es que cada vez hay más personas buscan mayor asertividad en cómo manejar y potencializar su dinero, y más allá del dinero, el ahorro se vuelve una herramienta de protección no sólamente para nosotrxs y nuestro futuro, sino para nuestra familia y la gente que más queremos.
En un mundo que se mueve tan rápido, en algunos momentos se genera incertidumbre en qué pasará con nuestro dinero en el corto, mediano y largo plazo y aunque sí nos preocupamos por esto, no siempre buscamos alternativas para tener la tranquilidad que se anhela.
Muchas veces, el gran reto para empezar un plan de ahorro, es que no tenemos claridad de los objetivos o proyectos que queremos realizar. Nos perdemos en querer encontrar el sentido de estar ahorrando, y entonces dejamos de ver que toda nuestra vida es un proyecto, y para cada proyecto requerimos de una estrategia.
Teniendo un plan de ahorro, estamos más cerca de alcanzar cada meta ya que existe el capital necesario para aprovechar incluso oportunidades que potencialicen, mejoren o crezcan ese proyecto.
Por ejemplo, si tu plan es comprar una casa, y ahorras para eso, en el momento que se presente una buena oferta para adquirir algún bien, podrás aprovecharla y tenerla por un menor costo; lo mismo pasa si tu intención es invertir.
Otra gran ventaja de un plan de ahorro estratégico y formal, es que, en caso de que la persona que lo contrata fallezca, el proyecto queda saldado (seguro de ahorro, educativo, hipotecario). De esta manera, brinda aún más tranquilidad y confianza, al saber que todo el esfuerzo será retribuido.
O, hablando de un tema como la inflación, un plan de ahorro blinda tu poder adquisitivo a través del tiempo.
Sin duda, el ahorro es un hábito del que debemos apropiarnos y aplicarlo como el tomar un vaso con agua, para poder tener una estabilidad financiera mucho más sólida. El primer paso es identificar los proyectos que tenemos, para que entonces le demos un valor más allá del económico a cada aportación y, cuando menos nos demos cuenta, habrá pasado el tiempo necesario para poder cosechar los frutos de todo lo invertido.
Si tienes proyectos en mente o si quieres sentir la seguridad de tener un capital estable para alcanzar los sueños que vayan surgiendo en el camino, te invito a que te pongas en contacto conmigo y pueda guiarte y asesorarte en la construcción de un plan de ahorro perfecto para ti.
Mariana Canto
Your Financial Partner in Life